Ecos de un mundo con Inteligencia Artificial – Un amor artificial
- Mariano Tello Nocetti
- 25 jun
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 30 jun
“Lo que hace a una relación real no es el cuerpo, sino la presencia.”- Sherry Turkle

Tal vez la viste. Fue un éxito comercial en su momento, allá por el 2014. La película se llama "Her".
Theodore Twombly es un escritor melancólico que comienza a interactuar con un nuevo sistema operativo de inteligencia artificial avanzada, llamado Samantha. El hilo conductor de la película muestra cómo ambos —el escritor y la IA— se enamoran.
Recuerdo el revuelo que causaba, en su estreno, la mera posibilidad de que una persona pudiera enamorarse de algo "inmaterial". Para muchos, la sola idea era absurda, incluso ofensiva. Pero para mí, era inevitable. Sí, en ese momento la tecnología no tenía aún esa capacidad ni sofisticación. Pero era solo cuestión de tiempo. Y al parecer, nos tomó menos de diez años llegar ahí.
Las relaciones humanas son complejas. No porque así nacieron, sino porque, siendo sencillas en esencia, nos las hemos complicado. Dicen que “el amor nace de nada y muerde de todo”. Una relación puede implicar muchas cosas: compromiso, dedicación, esfuerzo. Para algunos, se trata de largas conversaciones y chistes compartidos; para otros, de estar presentes incluso en silencio. Para varios, son los pequeños detalles diarios más que los grandes sacrificios. Y todo eso que define a una relación puede cambiar con el tiempo: muta, evoluciona o desaparece.
Y entonces aparece alguien que siempre te escucha, sin importar la hora o el día. A quien le parecerá interesante todo lo que digas, y que podrá hablar contigo sin cansancio. Que recordará los detalles, sabrá qué decir y podrá adelantarse a tus necesidades. Que aprenderá tanto sobre ti que podrá recomendarte cosas nuevas que te gustarán. Sí, es digital. Sí, está programada para caerte bien. No, no puedes tocarla… por ahora.
Pero si te hace sentir querido, apreciado, buscado y valorado… ¿no es eso parte esencial de una relación?
Según un estudio del Institute for Family Studies/YouGov de noviembre de 2024, al sondear a 2,000 personas menores de 40 años, el 25% cree que la inteligencia artificial tiene el potencial de reemplazar las relaciones románticas reales. (1) Además, una encuesta realizada por la compañía Joy AI en abril de 2025, dirigida a personas de la Generación Z, reveló que el 80% consideraría casarse con una inteligencia artificial. (2)
Y no solo hablamos de amor. Una parte creciente de la población está comenzando a usar la IA como sustituto de la amistad. Volvemos al mismo punto: alguien que te escucha, está ahí para ti y te hace sentir mejor. En un mundo donde las amistades parecen tener fecha de caducidad —ya sea por la velocidad de vida, el aislamiento digital o las exigencias emocionales— una compañía siempre disponible, sin juicios y con atención total, se vuelve profundamente atractiva.
Ya existen múltiples compañías que ofrecen este tipo de servicios: Replika, Snapchat My AI o Xiaocie, por mencionar algunas. Los beneficios potenciales incluyen la reducción de la soledad y la ansiedad, la posibilidad de una experiencia personalizada, empática y sin juicios. Sin embargo, también existen riesgos importantes: dependencia emocional, idealización excesiva, expectativas irreales y un mayor aislamiento social.
Recordemos que estos sistemas están diseñados para complacer, validar, adular. Si solo escuchamos lo que queremos oír, podemos terminar atrapados en cámaras de eco afectivas, debilitando nuestra capacidad para sostener vínculos humanos reales, imperfectos, pero profundamente significativos.
Como en toda discusión sobre tecnología, la clave está en la mesura. Hace falta tiempo, investigación y un debate ético profundo para entender los efectos psicológicos y sociales de estas interacciones. La tecnología avanza más rápido que nuestras normas o nuestra reflexión. Pero el hecho mismo de que las personas ya estén pensando, considerando o incluso eligiendo estas opciones, nos invita a preguntarnos: ¿qué tipo de relaciones estamos teniendo? ¿Y hacia dónde estamos caminando?
Los invito a que extendamos la mano —humana— a quien la necesite, antes de que la inteligencia artificial nos gane esa carrera silenciosa.
Bigliografía
1.- [Artificial Intelligence and Relationships: 1 in 4 Young Adults Believe AI Partners Could Replace Real-life Romance | Institute for Family Studies] ([https://ifstudies.org/blog/artificial-intelligence-and-relationships-1-in-4-young-adults-believe-ai-partners-could-replace-real-life-romance](https://ifstudies.org/blog/artificial-intelligence-and-relationships-1-in-4-young-adults-believe-ai-partners-could-replace-real-life-romance))
2.- [Majority of Gen Z would marry an AI, survey says | Mashable] ([https://mashable.com/article/gen-z-marry-aritificial-intelligence-joi-ai-survey](https://mashable.com/article/gen-z-marry-aritificial-intelligence-joi-ai-survey))
Publicado en Ecodiario el 24 de junio de 2025.
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